¡FERTILIDAD!
EL PRIMER PASO PARA DISFRUTAR DEL NACIMIENTO
Si después de un año de relaciones sexuales sin protección no ha sido posible tener hijos, es necesaria una evaluación médica. La OMS define la infertilidad como «la falta de concepción en un plazo de doce meses, siempre que se produzcan relaciones sexuales con regularidad y sin protección». Un diagnóstico exacto es esencial para encontrar el método de tratamiento adecuado.
La fertilidad del hombre depende, entre otras cosas, de ser capaz de depositar un gran número de espermatozoides maduros y funcionales en el tracto genital femenino en el momento de la ovulación. Cualquier pareja que quiera tener hijos debe ser consciente de que las funciones reproductivas masculinas y femeninas deben trabajar unidas. Por este motivo, una evaluación diagnóstica es importante tanto para hombres como para mujeres.
EL ANDRÓLOGO (m)
Experto en infertilidad masculina
La andrología trata de la «salud reproductiva del hombre» y es un campo especializado de la urología. En este sentido, es el equivalente masculino de la ginecología. Un examen andrológico comienza evaluando el historial clínico previo del paciente. El médico hará preguntas sobre la infancia del paciente y el desarrollo en la pubertad. Las preguntas iniciales también evalúan la conducta sexual en la relación (frecuencia de las relaciones sexuales, etc.). Posteriormente, se realiza un examen físico de los genitales externos y un ultrasonido de los testículos.
El proceso también puede implicar la determinación de parámetros de laboratorio relevantes (p. ej., testosterona, FSH, HL, prolactina). El objetivo del examen es analizar con precisión el líquido seminal. El espermiograma desempeña un papel importante a la hora de identificar una posible infertilidad masculina. Este análisis abarca el examen de la calidad de los espermatozoides con el microscopio para determinar las posibilidades de una procreación exitosa. Los expertos examinan el número, la motilidad y la forma de los espermatozoides.
LO QUE TU MÉDICO DEBERÍA SABER:
La historia del paciente puede proporcionar indicadores importantes de la existencia de posibles trastornos.
Por eso, deberías informar a tu médico de los siguiente:
- Enfermedades generales.
- Paperas después de la pubertad.
- Lesiones testiculares.
- Operaciones (p. ej., hernia inguinal).
- Venas varicosas.
- Tratamiento médico debido a que uno o ambos testículos estaban fueran del escroto al nacer.
- Infecciones de vejiga.
- Diabetes.
- Trastornos de la tiroides.
- Radioterapias.
- Enfermedades venéreas.
- Nicotina, alcohol o drogas.
- Posible exposición a intoxicación ambiental.
- Medicación tomada por la madre durante el embarazo.
- Enfermedades hereditarias en la familia.
¿QUÉ PUEDE RESULTAR DE AYUDA?
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Cambios a un estilo de vida saludable
P. ej., dieta equilibrada, dejar el tabaco y el alcohol, actividad física y descanso habitual.
Normalización del peso
Psicoterapia
Técnicas de reproducción asistida
P. ej., inseminación, reproducción in vitro o ICSI (microinyección intracitoplasmática de espermatozoides).